jueves, 6 de agosto de 2009

París diferente

Como siempre decidí escapar de la masa de turistas, tarea que fue bastante dificil en la ciudad que más de ellos recibe en el mundo.

Sin embargo lo logré :-p


De lo que no logré escapar fue del frío, el problema fue que, después de sobrevivir los -21ºC en Alemania, cuando vi sol después de tanto tiempo me hice el valiente y salí a dar recorrer la ciudad sin campera. Los indigentes (que son bastantes) sobreviven durmiendo sobre los respiraderos del Metro (que por suerte son bastantes también).

El bellísimo Forum des Halles (notar que pese al sol, el agua está congelada)


Para no morir de hipotermia en un momento me metí a una galería de arte (antes había estado sobre un respiradero del Metro pero el linyera volvió y me tuve que ir). Encontré cosas muy under o avant garde, pero a diferencia de lo que suele suceder en Argentina, aquí se cotizaban bastante bien. ¿Cuánto costaría esta escultura si estuviera expuesta en alguna placita de artesanos en America Latina?

"Miaou" costaba nada más que €1200


Quería pasar por Notre Dame pero creo que me confundí y llegué a un casino que era bastante parecido a la famosa iglesia. En realidad no tenía ningún cartel luminoso pero lo reconocí por el ruido a monedas, lo bueno era que todos ganaban, yo me gané una estampita de Benedicto. El jackpot era una bendición después de un show de luces e imágenes bíblicas.


No me rendí y seguí buscando la iglesia más famosa de París. Entré a varias que me llamaron la atención pero parece que estaban opacadas por el casino y tenían que aplicar otros métodos para atraer fieles.



Tampoco fui al Louvre (ya me volveré más convencional algún día... o lo miraré en video) pero sí al Museo de Arte Moderno de París (11 Avenida President Wilson) que es gratis. Ahí me enamoré de la obra del expresionista Bernard Buffet.

Menos turístico, más auténtico. La fachada del Museo.


Otro punto, poco común pero muy interesante, que me encontré pateando París fue el antiguo hospital Saint-Louis (más de 400 años de antiguedad, el doble de vida que la Argentina jejeje). Se construyó alejado de la ciudad (ahora es el Décimo Arrondisment) para poner en cuarentena a los infectados de la epidemia de la peste.

Camino hacia l'Hôpital Saint-Louis


Año nuevo lo pasé en una casa en la banlieue sureña de París con la persona que me hospedaba: mi gran amiga Clemence (que conocí en Mendoza mientras hacía un año de intercambio), y además con su divertido novio Quentin y sus amigos. Comimos y tomamos a lo francés, todo era espectacular, y debo decirlo, había unos bombones parisinos que dejaban al resto de los manjares en segundo plano. La presión!!!!!

La cuenta regresiva para el 2009 :-)

Gracias a ella conocí también Clichy, donde habitan un 22% de extranjeros (principalmente musulmanes) y un dpto pequeño de 2 habitaciones cuesta super barato en comparación con París: nada más que €2.000 lo que se dice una ganga. Debo citar una frase épica de mi querida sajona Julia "Sólo h... de p... tienen el dinero suficiente para vivir en París" (se refería al centro no las afueras o banlieue)

¡¡¡¡Gracias por todo Clemence!!!!



Bueno para ir terminando les dejo un último consejo para cinéfilos como yo. ¡No se pierdan la Cinemateca Francesa! Ojo, no es el Museo del cine que queda cerca de la Torre Eiffel en Trocadero.

El baño queda por allá y la cinemateca por acá


A pesar de hacerme el renegado París fue la ciudad donde saqué más fotos, un promedio de 31 fotos por día. Acá les dejo un par más.


La orilla del sena


El tara service francés


Si alguien sabe árabe por favor traduzcanos


París es careta


Sin embargo, París me sonrío

viernes, 3 de julio de 2009

Navidad en Grenoble

El viaje continuó más tranquilo con Anna y un amigo de ella hasta Grenoble, donde viven sus padres y su abuela, los queridos Landau.

Pasamos una navidad típica en familia:

Mucha comida rica pero la estrella de la noche fueron "les escargots" (los caracoles) en una salsa de perejil y demás especias. Deliciosos!

No faltaba más, se sirven en sus platitos especiales.



Aquí en detalle para los más impresionables

Hermanita: No te tienta?


Más tarde vino toda la parafernalia de los regalos e ilusión para los más pequeños, que luego comentaban el curioso parecido de Papá Noel con la tía Anna. Jejeje.

El más contento de todos era Andrei que se jactaba de ser el que más regalos recibió y armó una torre con ellos para demostrarlo.

Decía: Regardez! Regardez mon tour de cadeux! Un aparato.


Grenoble es una ciudad que me hizo acordar a Mendoza. Tiene uno de los aires más contaminados de Francia y se debe, entre otras cosas, como en Mza, a la geografía ya que está rodeada por los alpes.

La vista desde la altura es bellísima

Hasta aquí subimos caminando.


Las montañas nevadas del fondo son Chamrousse el centro de ski.


Postal típica del téléphérique de Grenoble. Abajo el centro histórico.


Y ya que estábamos. ¿Porque no darnos el lujo de un día de snowboard con la multifacética Anna?



Grande Anna!


Sin palabras


Tuve pocas noches de boliche hasta el amanecer pero aquellas son inolvidables.



Esa misma mañana partí hacia París en un auto compartido ("covoiturage" se llama en Francia).
El punto de encuentro fue la estación de trenes, y además del abrazote de Anna me quedé con esta última imagen: El reflejo de la primer montaña que habíamos escalado.


domingo, 31 de mayo de 2009

Aventuras a dedo: Barcelona - Toulouse

Tuve un paso efímero por la ciudad del modernismo (algo me decía que volvería a esa ciudad) y partí hacia las afueras con un tren, en búsqueda de una estación de servicio con muy buenos comentarios en hitchwiki. Tuve que caminar mucho y atravesar una propiedad privada para llegar pero de hecho en 5 minutos me subí al auto de unos italianos.  
Dos sardos  buena onda que iban hasta Marsella. Ahí comprobé que puedo comunicarme muy bien con los italianos. 

Ademas aprendí de un grave error que cometí. Ellos me dejaron en la bifurcación de la ruta porque yo no quería pasarme e ir en la dirección contraria de Toulouse... pero debería haber seguido hasta el próximo peaje o haberme quedado en la estación de servicio que habíamos pasado un par de kilómetros antes... en fín... me bajé en la mitad de la autopista y comencé a caminar dirección a Toulouse. 

La vista era aterradora. Las proporciones cambian brutalmente cuando uno va en auto a 140 Km/h y de repente se convierte en un alfeñique peatón en una autopista. Sólo debía llegar al próximo peaje. 



Con mis dos mochilas cada paso a través de esos arbustos fue un suplicio. Tuve que cruzar un alambrado y no podía evitarlo, tenía que pasar al otro lado de la ruta. Me dió bastante miedo. El tráfico era espeso y muy veloz. Cuando logré cruzar los dos carriles en un sentido y quedé en el medio de la autopista protegido por las barreras laterales, los autos me tocaban bocina y me hacían cambios de luces. A los 30 segundos no tuve tan buena suerte y pasó un patrullero. Me gritaron que estaba loco y que caminar por la ruta estaba prohibido. Frenaron un poco el tránsito y pude llegar al otro lado. 
Primero me pidieron el pasaporte, me hicieron un par de preguntas, me cagaron a pedos, me multaron y luego elogiaron mi francés. Me costó sólo €11 el chiste pero me dejaron en la loma del culo en la entrada a la ruta nacional, en cuya banquina sí se puede caminar. Anduve más de una hora (unos 7 km) con mis mochilas hasta la estación de tren del próximo pueblo. Pero qué importaba! Estaba en Francia! Y me comí mi primera baguette. 



Llegué a Narbonne, una ciudad medieval bellísima. No debe ser tan impresionante como lo que me contaron de Carcassonne pero yo llegué en un momento especial, la víspera de Navidad.


Primera impresión de Francia: Estacionamientos con enchufes para autos eléctricos.


Se estaba haciendo de noche así es que me compré un pasaje de tren a Toulouse y me fui a recorrer la cuidad.

Doblé por una callecita y me encontré de frente con este desfile espectacular.


Lo seguí y llegué a la plaza principal donde había una gran pista de patinaje frente al municipio. El ambiente era surreal.


Al final entre la multa y el pasaje de tren desde Narbonne hasta Toulouse con el dedo terminé ahorrando unos €10. Hubieran sido 40 pero no habría tenido tanto para escribir :-p

Finalmente después de un día larguísimo me recibieron unos abrazos de mi gran amiga Anna. Era el tercer país en el que nos encontrabamos (Argentina, Rumania y Francia). Una alegría tremenda verla en su casa y en su ritmo normal de vida. 

Camino a casa por las calles decoradas por la navidad.


Primer día en Francia, primera manifestación. No podía ser de otra manera.
 Si agrandan la foto se alcanza a leer "Comité CGT" el resto se lo imaginan. Qué grandes los franceses!


La victoria tiene unas tetazas!


Típico carrusel francés


El río Garonne (Garona) imponente


Otra cosa típica de la temporada: Des huîtres (ostras)

Se compran frescas en el mercado, deben estar vivas al abrirlas, de lo contrario pueden ser peligrosas. Se me dijeron cerca de navidad siempre se muere alguien intoxicado. 
Con un poco de limón nos damos cuenta cuando se retuercen un poco, y ante la duda, a la basura! Después se despegan un poco con un cuchillo y blurp! 

Cof cof tragué un poco de arena en la última :-/


Noche de copas con Anna


Te quiero mucho Amiga-Ingeniera-Enóloga-Artista-Bonne Vivante

Aventuras a dedo: Alicante - Barcelona

Había comprado un vuelo barato a Alicante y un pasaje de tren aún más barato desde París a Dresden. El objetivo era visitar amigos que estaban estratégicamente ubicados en Alicante, Barcelona, Toulouse, Grenoble y París.  Por primera vez no corría contra reloj para llegar a los diferentes destinos, los amigos te esperan siempre con los brazos abiertos. 

Así fue que decidí aventurarme por primera vez en el arte del autostop. 

Como es bien sabido lo más difícil es salir de las ciudades. Mi estrategia fue tomar un bus de línea hacia las afueras y bajarme en alguna estación de servicio cercana a la ruta. Estuve como 2 horas sin éxito, hasta que un buen hombre me dijo estaba mal ubicado ya que ahí paraba mayormente gente que vivía en las afueras, como él, y se ofreció a llevarme hasta el primer peaje de la autopista. Él había hecho mucho dedo en los 70's y me contó que en esa época era más fácil porque la gente no estaba tan asustada como ahora.


En España es ilegal hacer dedo en los peajes (sobre como hacer autostop recomiendo hitchwiki.org que ofrece amplia información general sobre la reglamentación en cada país y lugares estratégicos en miles de ciudades posteados, calificados y comentados por la gente. Aguante el conocimiento colectivo!) 


pero decidí arriesgarme... al fin y al cabo en estos países las reglas se hicieron para romperse. 

"Cagué" pensé mientras un guardia se me acercó  y me dijo que ahí no podía estar (atrás del peaje) pero me alivié inmediatamente cuando me dijo: adelante si puedes estar... es menos peligroso. De la ilegalidad de hacer dedo en el peaje  algunos no se enteraron por suerte.

Al poco tiempo un joven camionero español me llevó por la hermosa ruta costera. A penas después de conocernos me preguntó si fumaba, no, no, gracias, y cómo ya venía de regreso a casa se relajó con un poco de hachís. Creo que es menos peligrosa la usanza de nuestros camioneros de tomarse unos mates o masticar un poco de coca. Jejeje.

El amigo me dejó en otro peaje y a los pocos minutos ya estaba en un auto con un tipo raro, de esos que se conocen haciendo dedo. El tipo hablaba muchísimo y se prendió un porro gigante. Se quejaba de los hijos de puta de los políticos y de los putos impuestos, como por ejemplo el puto peaje ¿Por qué mierda debía pagar él, además de todo, un puto peaje? ¡Qué lo paguen los turistas! Se fue enervando más y más  hasta que llegamos al próximo y me asustó un poco. Se puso muy cerca del auto de adelante que estaba pagando y empezó a acelerar violentamente, así cuando el otro auto avanzó él lo siguió y cruzamos sin pagar, con la barrera bajando muy ajustadamente sobre el auto.



Más adelante nos topamos con un embotellamiento. Cómo él estaba muy apurado para llegar a un almuerzo, decidió tomar el camino por los pueblos. Yo decidí infringir una vez más la ley y caminar por la atorada autopista en busca de un alma piadosa. Con mi cartel "BCN" pasaba por al lado autos haciendo caritas. Nada. Sólo un camionero muy intrigado me preguntó: pues a dónde quieres ir? Qué quiere decir tu cartel? 
Es como que haciendo dedo de San Rafael a Mendoza te pregunten que quiere decir tu cartel "MZA". No me dejan de sorprender algunos gallegos.

Estaba en el medio de la autopista, ya se estaba desarmando el embotellamiento y yo no conseguía quien me llevase. Estaba estratégicamente muy mal ubicado pero a último momento se paró un cincuentón con pinta de buena onda que iba a Barcelona. Cómo no podía ser de otra manera el tipo necesitaba un par de orejas para hacer catarsis. Durante dos horas me contó su reciente escabrosa separación con su novia (veintipico años menor) y gran parte de su vida. El tipo era Suizo pero vivía en España hacía muchos años, había trabajado importando diamantes de sangre en África y poco a poco se fue metiendo en ambientes cada vez más pesados hasta convertirse en mercenario. Había hecho trabajos sucios durante años pero ahora se dedicaba a cosas más normales como los negocios inmobiliarios y los cabarets. Actualmente estoy leyendo un libro sobre su vida (bastante mal escrito pero jugoso contenido).

Después de viajar 8 horas, 550 Km, en cuatro vehículos diferentes con gente muy diversa llegué sano y salvo a Barcelona dónde me hospedé en lo del DJ Pulido un mendocino amigo del Laureano.

La arquitectura modernista de Barcelona es tan famosa que no voy a poner las fotos clásicas de las obras de Gaudí ni de Domenech (Palau de la música catalana), que están gastándose ya de tantos flashes de los tourists.

En cambio cuelgo un par de fotos de edificios que no aparecen en los mapas ni en las guías "Europa in one shoestring".




Este edificio me llamó mucho la atención y después de observarlo un rato vi que tenía unas molduras simétricas con las inscripciones: "España - Argentina"


 Una intervención artística con las bicicletas del ayuntamiento de Barcelona, después de una noche excepcional en un bar en el barrio de Gracia (recomendable) donde trabaja mi amigo "el Bel"

viernes, 8 de mayo de 2009

Alicante: Invierno sazonado con amigos (14-20.12)

Llegó el invierno y con él las vacaciones. Y como es la usanza alemana me fui a un lugar más cálido.

En Alicante me esperaba el calor de dos de mis mejores amigos, los recientemente emigrados, Johnny y Juliana y de mi prima Luciana, ya instalada hace tiempo.


El Johnny ¡Qué hombre admirable!


La doctora Juliana con la cara con la que atiende a sus pacientes


Recién llegado, dejé mis equipaje en la casa de los chicos y salimos pasear por la playa. Mientras nos poníamos al día, le comenté a Juliana que quería llamar a mi prima para encontrarnos por la noche. Segundos después le dije: "Che si esa que viene corriendo no es ella, pega en el palo" 
Acto seguido, AAAAAAAAAAAHHHHHHHHH!!! gritó con emoción y toda su efusividad. PRIMO!!!!!!! Si bien sabía que yo llegaría algún día de esos, se sorprendió muchísimo de tal coincidencia.


Aqui todos en el dpto de mi prima Luciana


La ciudad, como gran parte de España, estuvo ocupada 500 años por los árabes. "Al-Laqant" fue un objetivo muy duro de reconquistar. La única manera en que pudieron vencer el impenetrable castillo fue dejándolo sin agua.

En la cima un castillo "abandonado" con el baluarte árabe de fondo.


Che, allá arriba nos tomamos unos matecitos, no?


Alicante es una pequeña ciudad de la costa mediterránea bastante turística en verano. En temporada baja y con el estallido de la crisis en Europa, la encontré en estado casi vegetativo. Los restaurantes e inclusive los bares estaban vacíos. 
Hasta entonces la "crisis" había sido objeto de mi menosprecio, ya que en Alemania se hablaba de la crisis económica más grande desde la guerra y, sin embargo, los centros comerciales y navideños estaban tan saturados de gente como siempre y los inmigrantes seguían haciendo los trabajos que los locales no quieren hacer.


Un día hicimos una excursión a un pueblito muy pintoresco llamado Villajoyosa. Ahí conocimos el despecho hacia los extranjeros cuando al preguntarle a un pibe por una dirección, escapando furtivamente, nos contestó: "No hablo inglés"



Una vez más nuestros caminos se encuentran... Y las veces que lo harán!


jueves, 16 de abril de 2009

Amigos en Dresden - Cocina del pueblo

En mi primer viaje a República Checa gracias a Filipa conocí a Paul, un chico de Dresden que vivió en Praga un año y medio haciendo  un práctico y su servicio civil (alternativa al servicio militar) en la misma granja donde era voluntaria Fili. 
Nos conocimos en un bar y en 5 minutos Paul dijo "Nos tenemos que juntar en Dresden!". Se moría de risa de mi marcado acento sajón (la provincia de Dresden). Se podría hacer la analogía de un alemán que hable español como un sanjuanino.



Así fue que un domingo tipo 18 hs me llamó y me invitó a cenar a su casa EL MISMO DÍA A LAS 20 HS... comportamiento muy inusual para el alemán tipo. Me cayó muy bien ese síntoma de espontaneidad y des-estructura. De hecho, conocí a muchos amigos/conocidos de Paul y su novia Saskia que seguían ese patrón de comportamiento tan raro. Gente suelta, abierta, relajada, que disfruta sin mirar el reloj, generosa, divertida, etc. bastante diferente a las maquinitas que había conocido hasta entonces.



Este grupo tan singular se junta todos los domingos en la casa de Saskia, un piso compartido muy antiguo con 4 habitantes, entre ellos un punk re aparato. La costumbre es que algunos llevan algo y cada semana cocinan diferentes personas. No hace falta confirmar la asistencia y gente nueva es bienvenida. Algunos domingos éramos 7, y otros, más de 20. A veces la comida no era tanta pero nadie se alteraba. Siempre había algo diferente, a veces cosas comunes y a veces extravagantes. Por supuesto tuvimos la noche argentina y los deleitamos con unas empanadas %100 caseras. Flashearon.  



Uno de los chicos que iba algunos domingos, organizaba una "cocina del pueblo" (VOKÜ o Volxküche, término modificado con una connotación de izquierda de Volksküche (sopas que daban organizaciones cristianas de preguerra). Los jueves en un ex consultorio odontológico que ya no podía funcionar porque el edificio estaba en muy mal estado, ofrecen comida vegana (sin derivados de animales) a €1,5 y cerveza igual de barata. Además es un espacio abierto y gratuito para cualquier tipo de arte, conciertos, teatro, películas, charlas, etc.
En Dresden hay casi cada día una VOKÜ en diferentes partes de la ciudad. Una idea maravillosa!


Con Paul conocí el pueblo de la edad media donde él estudió, Pirna, era muy pintoresco y tenía un bar con una gran movida musical. Ahí vimos un concierto de Jazz y a la cantante de "Kleingeldprinzessin" (reina del dinero pequeño (del cambio). Si quieren conocerla y descargarse algunos discos pueden ver mi post de ella en taringa). 



Y así fueron muchos momentos con este gran pibe y su novia a quienes espero volver a ver.