lunes, 15 de septiembre de 2008

Bratislava pequeña pero adorable (27-28.09)

Por primera vez llegué a un país donde no podía decir ni "hola" en el idioma local. Hablando en inglés todo el mundo respondía bastante bien aunque fue complicado conseguir cambio para el bus local ya que no me había venido preparado con Coronas Eslovacas. Recomiendo cambiar algo de dinero con anticipación si van a llegar de noche como llegué yo :-p
Me bajé en una parada más o menos cerca del dpto de Zuzzka (Susanita... nombre típico Eslovaco), una chica de mi edad (24) recién recibida, independiente y muy interesante. Vivía en una zona para nada turística, en el barrio Petržalka que hospeda a más de 100.000 personas, 1/4 de la población de la Bratislava.

Pollo: que pensás del arte arquitectónico comunista? A mi me encantó. Lo mejor eran los ascensores.

El centro histórico es muy pintoresto y en algunas callecitas se encuentran edificios destruídos y menos turistas.

El castillo en lo alto al lado del Danubio es muy imponente. La foto la copié de wikipedia porque me olvidé de sacarle una yo. Vaya turista soy!! De todas formas así es como se ve en verano.


Por la noche cuando Zuzzka volvió del trabajo me llevó a pasear por lugares no turísticos, fuimos al supermercado donde compré "Kofola" la gaseosa cola del comunismo Checoslovaco y el fernet más tomado en Eslovakia "Stock" (tan bueno como el Branca) y cenamos comida típica en un típico restaurant "Slovak Pub". Imperdible.

Mi adorable anfitriona y las deliciosas Bryndzove Halusky y Bryndzove Pirohy (pseudo ñoquis de queso de cabra y pseudo tortelinis también de queso de cabra. Una bomba deliciosa.

Otra cosa curiosad que no puedo dejar de comentar es la cantidad y calidad de mujeres hermosas. En Mendoza abundan mujeres bellas pero en Bratislava no lo podía creer. No vi ni una mujer fea... había algunas de belleza promedio pero la mayoría eran INCREÍBLES.

Perdón mujeres por el comentario tan superficial, espero sepan entender.

domingo, 14 de septiembre de 2008

En el campo con Karin - Otra visión de Austria (25-26.08)

Fui a visitar a Karin, mi primera huesped de HospitalityClub, a su pueblito Purgstall (5000 hab) a unos 100Km de Viena, en la baja Austria donde comienzan los alpes.

Almorzamos en lo de su tía (71) y su abuela (96), donde preparan comida como para un batallón y se alegran siempre por las visitas. Algunos parientes terminaban de comer cuando llegamos.

Una sopita crema de Zucchinis con papas? Bueno! Mmmm está riquísima. Otro plato. No alcanzan las papas! dice la abuela. Traigan más! Espero que te gusten los pimientos rellenos con salsa de tomate. Claro! Venga! Otro plato? No gracias ya estoy lleno. No te gustó???? Si, estaba riquísimo. Bueno servile otro dice la abuela (que habla en dialecto y no entiendo ni una palabra). Cafecito? Bueno gracias (bueno para bajar la comida, pienso). Probá la torta! Mmm acepto y la abuela insiste en ponerme otra porción en el plato.


Gente simple, ultra hospitalaria y generosa. La gente de campo es así... La diferencia es que en estos paises vivir en el campo no significa ser pobre. Tienen internet, toda la tecnología y la misma calidad de vida que la gente en la ciudad. Fenómeno contrario al nuestro, la gente está abandonando las ciudades para irse a esa tranquilidad del campo.


Digno de admiración la tía a sus 71 años en la tarea de secar el pasto para alimentar a las vacas en el crudo invierno.



Ella misma acopló la herramienta y la ajustó a patadas.

Karin me llevó a la montaña. en la foto se el límite entre la baja autria y los alpes, y un pueblito vecino. Se divisaban varios desde esa altura.


el comienzo de los alpes
También a bañarnos al rio. Arschkalt!


Pero lo mejor de todo fue la gente!

lunes, 8 de septiembre de 2008

Enamorado de Viena - Racional (19-24.08)

Ademas de esa inefáble y súbita vorágine me enamoré de Viena por muchas otras razones.
Arquitectura:
No entra su esplendor en fotografias pero ahi va mi intento.

La calle donde estaba parando.
(Parecida a muchísimas otras)

"A cada época su arte; a el arte, su libertad." Gustav Klimt


Atardecer

Las sgtes fotos son desde un mismo punto, a la izquierda el Rathaus

A la derecha Votivkirche (que estaba con reparaciones)

El ambiente:
Arte, libertad, arte, posibilidades, arte.
Museums Quartier. Es un "barrio" con variados museos, salas, cafés, y una plaza perfecta para un relajado picnic en los asientos-cama.
Tuve la suerte de encontrar una muestra de PUNK. Flasheé desde el primer segundo ya que fui recibido con música de Einstuerzende Neubauten. Había ropa, stands de Berlin, Londres, USA, ipods para escuchar música selecta, libros increíbles, pintura, documentales, videos y hasta una peli porno punk. Estuve solo 5 horas... debía ver muchas otras cosas en Viena.

Estaba prohibido sacar fotos pero tenía que compartilo con vos Johnny.

Transporte: En Viena, como en casi toda europa occidental, los ciclistas abundan y son respetados. Pero esta ciudad además fue pionera en promover aún más el ciclismo.
En muchísimos puntos de la ciudad hay estaciones de "Citybikes". Con una tarjeta de crédito cualquier persona puede crearse un usuario, cuesta un euro por única vez, y luego tiene la posibilidad de retirar una de las bicicletas estacionadas en el puesto. La primer desde que se retiró la bici es gratis. Si se devuelve la bici en cualquier estación luego de 15 minutos se vuelve a obtener una hora gratis. Así fue como jamás usé el transporte público y no gasté más que ese euro en movilizarme por toda la ciudad.

Fue la única gran ciudad en donde no se me ampollaron los pies de tanto caminar :)

viernes, 5 de septiembre de 2008

Enamorado de Viena - Emocional (20.08)

Zarpé con otro Mitfahrgelegenheit hacia Viena. Esta vez con unos estudiantes mucho más copados, no paramos de hablar y les encantó el mate.
Desde que me tomé el primer (y único) subte noté las diferencias. Los amigos se saludan con 2 besos. Se respira arte en todos lados. Justo el dpto de Sissy, una señora de 50 y pico que me recibió, quedaba cerca de una sala de ensayo así es que vi muchos músicos. Me empezó a gustar la ciudad. Fui recibido con Champagna (Sekt) y una gran sonrisa. Sissy fue lo máximo
desde el principio al fin. La amo en serio.
Primer paso: Buscar un mapa de la ciudad.
Seguí las instrucciones para llegar al centro atravesando el maravilloso mercado central que estaba a pocos metros. Pero me doblé en la dirección equivocada y terminé en la Karlsplatz. Hacia donde se mirara era maravilloso: La iglesia Saint Charles,
el museo, la estacion de subte diseñada por Gustav Klimt,la universidad técnica con su biblioteca (el edificio no era para nada técnico), todo hermoso. De fondo temas clásicos de acordeón tocados por un viejito... todo esto me empezo a emocionar. TANTA BELLEZA JUNTA!... ESTOY EN VIENA!! No lo puedo creer... He esperado tanto este viaje. Estoy en Viena!!... Es increible!... Todo es tan bello!... LA VIDA ES TAN HERMOSA.
No lo pude soportar más y rompí en llanto de felicidad. (Al escribir estas palabras lo vuelvo a sentir y estoy llorando de nuevo). Me temblaban las manos y lloraba intensamente. Me tuve que sentar porque pensé que me desmayaba. Cuando la emocion disminuyó un poco me acerqué al viejito, le di un euro y le agradecí inmensamente por el momento que me había hecho pasar. Su música fue el detonante de esa vorágine. Le dije en alemán: gracias, mil gracias, demasiada belleza (señalando alrededor) y la música! Gracias, gracias. No puedo creer estar acá... esta última frase no la pude terminar y me fui llorando nuevamente. Nunca habia sentido algo asi, tan vivo, tan humano, tan feliz.
No puedo seguir escribiendo. Estoy sitiéndolo de nuevo.